Honduras.- En el marco de desarrollar la política exterior SE Luis Garcia, Embajador Dominicano en Honduras atrae inversionistas y sostiene reunión de trabajo con Martín de Oliva, vicepresidente de Negocios del Área de Turismo del Banco Popular.
El vicepresidente de Negocios del Área de Turismo del Banco Popular considera que ya el panorama se vuelve más positivo, pues países que han sufrido fuertemente con la pandemia, con mayor preponderancia que República Dominicana, y que desgraciadamente han tenido más fallecimientos, aunque entiende que una sola vida es invaluable, ya han empezado a prepararse para la reapertura.
Reveló que en el caso de República Dominicana sólo basta con consultar los principales portales para ver la demanda información que se generó desde que el país y el sector turístico anunciaron que todo estaría listo desde el 1 de julio, incluyendo la apertura de los aeropuertos. A propósito de las oportunidades que representa el turismo interno, el embajador Luis Garcia expresó que afortunadamente ahora “conoceremos más nuestras bellezas naturales, pues el país es, además de sol y playa, tiene montañas y un montón de atractivos para inversión”.
De su parte el ejecutivo del Banco Popular, asegura que de ahora en adelante habrá un trato mucho más personalizado y estima que los hoteles cambiarán algunas de las estrategias para atender a los turistas, lo cual será para mejor. Indicó que la gente querrá ir a conocer los destinos más en profundidad, mientras que en los aeropuertos no habrá tanta masificación. “Es un momento de pensar fuera del cajón, de poner a desarrollar al máximo la imaginación para brindar a los turistas todo lo que se merecen”, expresa.
Destaca la capacidad de trabajo probada de los empresarios turísticos dominicanos, quienes, a su entender, han sabido levantar sus proyectos desde abajo, mostrando desprendimiento al invertir todo el dinero de la familia e integrándola al negocio. “No hay ningún hotelero que no haya pasado no una, sino varias crisis y de todas han aprendido y salido de bien. República Dominicana tiene una casta de hoteleros que va a ayudar a que esto salga mucho más rápido”, sostiene.