Honduras.- Una solemne eucaristía ofrecidas en honor a los Cuerpos Castrenses de Honduras, con la que se inician las festividades de tres días a la Virgen María, en su Advocación de Nuestra Señora de Suyapa, Patrona del Pueblo hondureño y Madre Espiritual.
Con esta eucaristía oficiada por Monseñor, José Vicente Nacher, Arzobispo de Tegucigalpa y Presidente de la Conferencia Episcopal de Honduras, con la asistencia del Cuerpo Diplomático en pleno, los Altos Mandos Militares de la Nación, autoridades civiles y de gobierno, el pueblo católico reunido en fe para honrar a su Patrona y devotos de los más lejanos lugares de Honduras y del mundo.
En la homilía, Monseñor José Vicente, hizo un recuento de la devoción del pueblo hondureño desde hace 277 años, fecha de la aparición de la Virgen, cuando fue hallada, según apuntes históricos, por los campesinos Alejandro Colíndres y Lorenzo Martínez, el 3 de febrero de 1747, en la aldea El Piligüin.
Como Patrona de los Cuerpos Castrenses, tiene conferido el grado de Capitana de las Fuerzas Armadas de Honduras, de ahí que las celebraciones en su Honor empiecen con la Misa de las Fuerzas Armadas del país cada febrero.
El fervor religioso es patente en los días de las celebraciones patronales logrando que sean visto los más variados testimonios de fe por parte de la feligresía y devotos de Su Patrona, Nuestra Señora de Suyapa, llegando gente del país entero a cumplir promesas y encargos que dejan boquiabiertos a propios y extraños, ya que la devoción se manifiesta en las formas más increíbles de profesar la fe católica a la Virgen de Suyapa.
Al evento religioso, representado a S.E. Dr. Luis García Mercado, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de República Dominicana en Honduras, asistieron, los Consejeros Dionicio de Jesús y Otto Morales, así como el Agregado Militar Concurrente en Honduras, Coronel de la Fuerza Aérea Dominicana, Israel Campos Almonte.